Thursday, March 26, 2015

¿QUÉ SIGNIFICA ESTO...? ¿Guerra en Irak...? ¿Ucrania contra Rusia?





No se asusten….!
Es solamente el Ejercito Argentino haciendo prácticas militares el 26 de Marzo del 2015, a las 11:40 de la mañana, en el camino que lleva a La Hoya, a un par de kilometros de Esquel.

En ese mismo momento, mientras nuestros soldados jugaban a la guerra, nuestros bosques en el querido Parque Nacional Los Alerces estaban en llamas.





Este es el campamento con decenas de soldados, camiones, y equipos militares.




La foto no es muy buena, pero a la derecha del poste podemos ver a dos de nuestros soldados practicando sus habilidades ecuestres. 



       









Hace dos dias, el 24 de Marzo, el pueblo argentino conmemoró con dolor a las víctimas de esa institucion criminal, pero evidentemente el mensaje no les llegó a los militares locales quienes, hoy, se están burlando nuevamente del pueblo.

Uno se pregunta: ¿No se les ocurrirá pensar que en ese mismo momento hay brigadistas sin vestimenta y sin equipo apropiado combatiendo el fuego en el Parque? ¿Estarán viviendo la realidad de Argentina y la cordillera al mismo tiempo que el resto de la población? ¿No podrían, al menos, simular que hacen algo por el pueblo argentino?

No encuentro calificativos apropiados para esta afrenta: ¿Zánganos?¿Irresponsables? ¿Oportunistas?


En fin, ustedes elijan.
Roberto Ochandio



 





                                                                          






                                                                  













Monday, March 23, 2015

Modificaciones al Código Civil – Camino de Sirga

Modificaciones al Código Civil – Camino de Sirga
Por Roberto Ochandio




El “camino de sirga” es un camino usado en tiempos pasados a ambos lados de un río para arrastrar botes río arriba. El uso y las costumbres hicieron que este camino quedara implementado como derecho de los habitantes en el Código Civil de 1871, el cual establece una franja de 35 metros a cada lado de un rio en las cuales no se puede hacer ninguna construcción que limite el paso, debiendo los dueños de terrenos ribereños respetar el acceso público al rio.

Sin embargo, las reformas al Código Civil a ser implementadas en Agosto de este año reducen la franja de 35 a 15 metros de cada lado del rio, y al mismo tiempo eliminan el carácter de camino público de dicha franja.

Estas modificaciones privatizan de hecho el acceso a las costas de nuestros ríos, constituyendo la mayor privatización de terrenos desde la campaña del desierto. Recordemos que el general Roca, después de su famosa campaña de exterminio, repartió los terrenos robados entre sus generales y los grandes comerciantes y financistas de la época. De acuerdo a Jacinto Odone en su libro “El Factor Económico en nuestras Luchas Civiles”, el Estado Argentino se desprendió en 1885 de 4.750.471 hectáreas, favoreciendo a 541 particulares amigos del poder (1). Los beneficiarios de esta entrega de tierras pueden hoy verificarse con solo ver los nombres de los pueblos y ciudades de las provincias de Buenos Aires, la Pampa, y Rio Negro.

Podemos evaluar la magnitud de esta nueva entrega territorial calculando lo que significa 35 metros a cada lado de los 29.766 km que cubren nuestros ríos (2):
29.766 km * 0,035 km * 2 = 2.084 km² = 208.400 hectáreas

Como medida de comparación, esto es equivalente al terreno ocupado por 10 ciudades de Buenos Aires, o la décima parte de la provincia de Tucumán. Pero estas no son 208.400 hectáreas en el medio del Océano Atlántico. Estas son 208.400 hectáreas en las zonas mas codiciadas y apreciadas por todos los argentinos.

A partir de ahora los dueños de terrenos ribereños, haciendo uso del derecho de propiedad, podrán cercar y construir sobre el camino de sirga, reservándose no solo el derecho de admisión a los mismos, sino también el derecho de vida o muerte sobre los que transgredan dichos derechos. Esto que en principio parece una exageración no lo es, dada la triste experiencia reciente en la Argentina en la cual rufianes a sueldo se encargan de golpear y matar a los que se arrimen a “sus” costas.

Los argentinos tenemos no solo el derecho sino también la obligación de demandar la nulidad de los cambios al Código Civil. Estos cambios significarán un robo descarado de los derechos de los habitantes de la república para beneficio de unos pocos secuaces de los gobernantes de turno.

Nuestro silencio convalidará el mayor robo de territorios de nuestra historia moderna, y para impedirlo debemos exigir a nuestros diputados y senadores que se opongan terminantemente a la modificación del Articulo 2639 del Código Civil actual.

No dejemos que la corrupción del gobierno actual, con su entrega de soberanía a corporaciones multinacionales y capitalistas locales, afecte la vida y los derechos nuestros y de nuestros descendientes.

En estos enlaces podrán encontrar los nombres, teléfonos, y dirección de correo electrónico de los diputados y senadores representantes de cada provincia. Ellos serán responsables por su acción, o inacción, por la convalidación de esta entrega territorial.



  1. Citado por Milcíades Peña en “Historia del Pueblo Argentino” (p.321)





Thursday, March 12, 2015

Audiencia Pública sobre Complejo Tecnológico Pilcaniyeu

El Viernes 27 de Febrero se realizó la audiencia pública para evaluar el proyecto de enriquecimiento de uranio en el Complejo Tecnológico Pilcaniyeu (CTP). Este proyecto fue inaugurado oficialmente en el 2014 por la presidente de la nación, prescindiendo de una audiencia pública donde se pudiera discutir los riesgos hacia la sociedad y el medio ambiente de dicho emprendimiento. Finalmente la audiencia pública se llevo a cabo después que el diputado provincial Alejandro Betelú presentara un recurso de amparo que forzó al ejecutivo provincial y la CNEA a una discusión pública.

Técnicamente, lo que se piensa hacer en Pilcaniyeu es bastante complejo: investigaciones relacionadas a reactores nucleares y el ciclo del combustible nuclear, la planta de conversión de hexafluoruro de uranio (UF6), la planta piloto para enriquecimiento de uranio por difusión gaseosa, y la planta SIGMA de enriquecimiento avanzado por difusión gaseosa. Todas estas actividades nos hablan de procesos complejos que, por estar relacionados a la energía atómica, despiertan la ansiedad de la gente.

Uno de estos procesos, el enriquecimiento de uranio, es de especial preocupación. Para los que no conocen, el uranio natural consiste de dos isótopos, o variedades principales: aproximadamente un 99,3% de Uranio 238 (U238), casi un 0,7% de Uranio 235 (U235), y pequeñísimas cantidades de otros isótopos. El uranio que sirve para los reactores nucleares es el U235 porque es fisible, es decir que su átomo se puede dividir generando energía atómica. Como el uranio natural es principalmente U238, entonces hay que someterlo a un proceso de enriquecimiento, es decir cambiar los porcentajes del producto final de manera que tenga un poco mas de U235.

Ahora bien, si como consecuencia del enriquecimiento el producto final tendrá un porcentaje mayor de U235, esto significa que quedará un remanente que tendrá menos U235 y mas U238. Este remanente es el subproducto del enriquecimiento conocido como “Uranio Empobrecido”. Típicamente, para enriquecer un kilogramo de uranio se producen unos 11 kilogramos de uranio empobrecido. Es decir que el enriquecimiento de uranio genera un volumen significante de residuos.

El uranio empobrecido tiene un 60% de la radiactividad del uranio natural, por lo tanto no implica un grave riesgo de contaminación radiactiva. Su principal problema consiste en que es un metal pesado y su ingestión o respiración conlleva un riesgo de intoxicación química, afectando especialmente a los riñones y pulmones.

El uranio empobrecido tiene sus aplicaciones, principalmente por su altísima densidad. Esto lo hace muy útil como contrapeso en quillas de botes, para balancear el centro de gravedad de los aviones, o para fabricar barreras que impidan contaminación radiológica. También tiene utilidad para los militares, los cuales lo usan en proyectiles por su alto poder de penetración.

Pero el uranio empobrecido se convierte en un elemento peligroso cuando explota o se prende fuego. En estos casos el polvo de uranio libera los subproductos de la degradación atómica del uranio los cuales tienen un alto grado de contaminación radiactiva. Las poblaciones de Irak y Afganistán pueden dar cuenta de la peligrosidad de este elemento, la cual se manifiesta en un aumento desproporcionado de casos de cáncer, leucemia, y malformaciones genéticas.

Todo esto nos dice que el uranio empobrecido no es un subproducto despreciable. Por los altos volúmenes de desperdicios, su toxicidad química, y su mal uso potencial, es un componente de este proceso que debe ocupar un primer plano en este proyecto de enriquecimiento.

Junto con lo residuos del combustible nuclear y los diques de cola de las minas de uranio, el uranio empobrecido convierte a la industria nuclear en la más sucia de las formas de energía: después de más de 60 años de operación de plantas nucleares, no hay un solo país que haya encontrado una manera eficaz y segura de almacenar estos componentes tóxicos y radiactivos. Una investigación rápida nos dice que el almacenamiento es uno de los principales problemas de las plantas de enriquecimiento de uranio. Dado el gran volumen de estos subproductos, es necesario una playa dedicada a los tambores de almacenamiento, más personal entrenado en detectar y reparar pérdidas de gases radiactivos, las cuales son inevitables en tambores de acero expuestos a la intemperie.

Sin embargo, el Estudio de Impacto Ambiental (EsIA) no menciona planes a largo plazo para el manejo de estos productos, cuyos riesgos se extienden por cientos de miles de años.

En general, el EsIA es un documento de una lamentable pobreza técnica, donde se cubre con exceso de datos el desecho de residuos cloacales pero no se describe en forma detallada el destino final de productos radiactivos peligrosos. Donde se dedica seis páginas (Sección 5.1) a la tarea de convencer a la población que las descargas de compuestos fluorados contribuirá a la salud dental de los pobladores. Donde se habla de la contribución de este proyecto a la grandeza nacional, pero se incurre al mismo tiempo en errores técnicos básicos como el uso de unidades de medida no estandarizadas. Pero el EsIA no solo es pobre técnicamente, sino que está desactualizado. Este documento fue producido en el 2012 basado en los planes que se tenían en ese momento, los cuales fueron modificados sucesivamente en detalles esenciales, entre ellos, los humedales donde se volcarán los residuos fluorados y su posterior vertido en aguas del rio Pichi Leufú. A partir de ahí, cualquier discusión sobre aspectos técnicos en la audiencia quedó desvirtuado.

Volviendo a la audiencia pública, esta fue una muestra más de la prepotencia con que el gobierno central impone sus proyectos sin molestarse en consultar la opinión de la población, violando su obligación de obtener la aprobación de las comunidades originarias afectadas. Esta audiencia fue en todo similar a otras audiencias y debates organizados por el gobierno para presentar sus proyectos de explotación de hidrocarburos no convencionales.

No hubo debate, sino descripciones por parte de funcionarios de todo pelaje sobre las maravillas de la industria nuclear. Estos funcionarios se encargaron de machacar hasta el cansancio cómo el enriquecimiento de uranio nos coloca en el selecto club llamado Grupo de Suministradores Nucleares, cómo el uranio enriquecido contribuirá al desarrollo de la medicina nuclear, cómo el proyecto de Pilcaniyeu creará trabajo para las poblaciones locales, y cómo la industria del uranio ha recibido un mal nombre por culpa de ambientalistas desinformados.

Entre los oradores que defendieron este proyecto tienen mención especial:
  • Jorge Barón, vice rector de la Universidad de Cuyo, quien después de describir la inocuidad de la minería y el procesamiento de uranio, dijo sentirse celoso porque esta planta está en Rio Negro y no está en Mendoza.
  • Los sindicalistas Aldo Villavicencio y Julio Cesar Medina, de ATE, con sus discursos fuera de época y lugar, gritándoles, al mejor estilo CFK, a los empleados de la planta para que confíen en el proyecto nacional, amenazando al mismo tiempo a los opositores al proyecto.
  • Hugo Edgardo Vicens, de la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN). Este señor asumió la responsabilidad por el control de las actividades del complejo de Pilcaniyeu. Este es el mismo agente de ARN que se negó a investigar la pérdida de elementos radiactivos en pozos de Rincón de los Sauces participando luego en una conferencia de prensa en Neuquén donde se le quitó totalmente importancia al incidente. Finalmente decidió irse de la audiencia antes que contestar a preguntas sobre los accidentes de Rincón de los Sauces.
  • Enrique Cinat, de CNEA, quien con gran solvencia técnica respondió a preguntas del público esforzándose para no decir absolutamente nada:
    • Sobre el transporte de uranio hacia y desde Pilcaniyeu su respuesta fue: no hay nada que transportar porque ya tienen todo el uranio necesario para la operación de la planta piloto. El EsIA declina comentar sobre los stocks amparándose en cuestiones de seguridad. No hace mención a que la planta piloto se convertirá en planta de producción a escala industrial para abastecer a las centrales de Atucha y Embalse y, eventualmente, su exportación, para lo cual sí será necesario el transporte de uranio natural.
    • Sobre el procesamiento, almacenamiento y destino final del uranio empobrecido su respuesta fue: no hay riesgos, el uranio empobrecido es muy bueno para hacer barreras de prevención.
    • Sobre la radiactividad resultante de productos de descomposición atómica, radio-226 y radón-222, su respuesta fue: no hay nada que preocuparse porque ya se han tomado todos los recaudos necesarios.
    • Sobre los riesgos del uranio en general su respuesta fue: no hay problema. El uranio está por todas partes en la naturaleza, lo consumimos a diario, y forma parte de nuestro cuerpo. Se le olvidó mencionar la diferencia notorias entre el uranio natural y el uranio activado por procesos artificiales.

En suma, si bien la audiencia pública era absolutamente necesaria para ayudar a esclarecer el objetivo de este emprendimiento, esta audiencia dejó a la población con nuevos interrogantes. Entre ellos, cuál será la fuente de nuevos recursos de uranio natural. La CNEA, por medio de Enrique Cinat, nos dice que no va a haber transporte de uranio natural porque ya tienen todo lo que necesitan. Sin embargo en declaraciones al diario digital Rio Negro, el 7 de Junio del 2014, la misma presidente de CNEA, Norma Boero, informó que el uranio natural sera extraído de Cerro Solo, Chubut. Recordemos de paso que la minería metalífera esta prohibida en Chubut y no cuenta con licencia social.

Si el enriquecimiento de uranio se efectuará en Pilcaniyeu a partir de procesos de desinformación tal como los mostrados en la audiencia pública por la CNEA, y además estas actividades estarán controladas por la Autoridad Regulatoria Nuclear, con sus pobres antecedentes en materia de control nuclear, nos queda la impresión de que estamos en mala compañía cuando se trata de mejorar la transparencia de las actividades de estas corporaciones estatales.